¡Soy una asusta-hombres!

Por: Patricia E, Garza Vásquez.

Así me lo expresó una persona del sexo masculino cuando me mencionó lo que pensaba de mi, me extraño y me llamó la atención su comentario. Me agradó su honestidad pero me quedé con la duda de el porqué me comentó eso, así que decidí preguntarle a un amigo muy cercano  y me expresa que efectivamente esa impresión causo. Que muchos de los hombres les agrada que las mujeres no sean como yo.

¿Cómo soy yo? Pues una persona independiente, que expresa lo que siente y lo que piensa y da a conocer cuando no está de acuerdo en algo, fui educada por unos padres que me enseñaron a saber como enfrentar a la vida y que sólo tuvo un hermano.

Pero analizando mas éste tema,  vivo en un país machista y no crítico a los hombres por ello, así fueron educados… ¿Por quienes? Pues por madres abnegadas y sumisas que si había hermanas, “ándale, dale de comer a tu hermano, que acaba de llegar”. “Atiende a tu hermano porque él es hombre” “Deja a tu hermano que él es hombre y el no debe de lavar trastos, eso hazlo tú”.

Afortunadamente mi madre no me educó de esa forma, al contrario mi hermano se sabe hacer de comer, lavar trastes y muchas cosas más, que a veces no lo haga, es porque se deja consentir por quien lo quiera consentir.

Nosotras las mujeres somos las culpables de ese machismo al estarlo fomentando a través de la educación que damos en la casa. Y si el padre es machista se refuerza aún más. “Tu cállate, porque no tienes derecho de opinar”, “¿Para qué estudias una carrera? Al rato se te atraviesa un novio y te vas a casar”, “Mejor deja que tu hermano estudie él va a ser cabeza de familia y tu no” ¿Cómo? ¿Cuántas mujeres cabeza de familia hay en nuestro país y han sacado no a uno sino a varios hijos adelante?

Si ser una asusta-hombres es ser esclavas de los hombres, si lo soy; si ser asusta-hombres es expresar mi punto de vista, si lo soy; si ser asusta-nombres es seguir preparándome en la vida, si lo soy; si ser asusta-hombres es valerme por mi misma, confieso si lo soy.

Porque recuerdo una frase de Ángeles Mastretta autora del libro “Arráncame la vida” que dijo en una entrevista lo siguiente: “Si una mujer se compra sus zapatos, sabe a dónde dirigir sus pasos”. Si deseamos erradicar el machismo en nuestro país , pongamos nuestro granito de arena si tenemos hijos varones, enseñarlos a respetar a la mujer, al valorarla, a no hacer distinciones de las actividades del hogar,  a respetar los puntos de vista, a ser tolerantes y sobre todo a convivir en armonía.

Vivimos en pleno siglo XXI y más de uno ha de pensar que soy una mujer feminista por aportar estas ideas, no, soy una mujer que fue educada de una forma diferente y no en un ambiente machista.

Porque si en el 2008 se reportó que una de cada cinco mujeres sufría violencia de su pareja, una de cada 3 había sufrido violencia por alguna pareja en su vida y 2 de cada 3 han sufrido violencia de algún familiar ¿Datos alarmantes no? Y el maltrato no sólo es físico, sino psicológico, económico  y sexual. Como conclusión podemos decir: Sigamos educando a nuestros hijos varones así y las estadísticas irán en aumento, cuando debe de haber respeto hacia las mujeres, finalmente todos somos seres humanos.

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